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Da igual que te dediques a la informática, a la medicina o a las ventas. Las habilidades blandas son necesarísimas para que logres tus objetivos.
Si bien es cierto que la experiencia en tu especialidad te va a hacer competente en tu área, la forma en la que te relaciones con los demás, las habilidades para resolver problemas o la comunicación escrita pueden marcar la diferencia entre lograr el éxito o no.
De hecho, según la NACE ( National Association of Colleges and Employers), organización de los Estados Unidos, en una encuesta que hicieron a un grupo de empleadores, concluyeron que estos son los rasgos más deseables en un empleado:
• Habilidades de comunicación escrita (82%)
• Capacidad para trabajar en equipo (78,7%)
• Habilidades para resolver problemas (80,9%)
Las habilidades técnicas también fueron ponderadas, pero sorprendentemente con valores muy inferiores en comparación con las habilidades blandas.
Por ejemplo, las habilidades informáticas obtuvieron un 55.1% de valoración en importancia.
Este resultado es curioso porque una de las primeras competencias que muchos imaginan a la hora de conseguir un empleo o desempeñar un trabajo tiene que ver justamente con lo técnico.
Sin embargo, los resultados indican que muchos empleadores están prestando atención a las habilidades sociales, más que en cualquier otra época.
Veamos entonces cuál es la definición de este valioso concepto.
¿Qué son las habilidades blandas y por qué son importantes?
Las habilidades blandas son rasgos de la personalidad que condicionan comportamientos y actitudes frente a la vida, en este caso, frente a la vida laboral.
De modo general, estas habilidades se refieren a la comunicación interpersonal en sus diversas facetas. De ahí que sean tan solicitadas en la resolución de conflictos.
Además, quienes tienen o han desarrollado buenas competencias blandas disponen de una mejor conciencia situacional para actuar según el escenario que se les plantee.
Esto es fundamental para quienes ejercen roles de liderazgo porque el buen liderazgo consiste en administrar un grupo de personas de forma inteligente y ayudarlas para que obtengan sus mejores resultados.
Un beneficio adicional de las habilidades blandas en el trabajo es que ayuda a que las personas se adapten con mayor facilidad a circunstancias de cambios rápidos e imprevisibles.
Quienes puedan comunicarse de forma efectiva en entornos de incertidumbre y sepan colaborar con otros llevan una incuestionable ventaja por sobre aquellos que no y que solo se afincan en lo técnico.
Dicho esto, no es de extrañar que cada vez más organizaciones y empresas inviertan dinero en formar a su personal en temas como la comunicación y la resolución de situaciones conflictivas.
Las 7 habilidades sociales que necesita en la fuerza laboral actual
1. Liderazgo
Si un empleado es capaz de generar y cultivar relaciones, bien sea hacia arriba o hacia abajo en la estructura organizativa, entonces estará contribuyendo con la motivación de los trabajadores.
Pero no solo eso, sino que será un auténtico influencer de la cultura organizacional que desee implantar la empresa. Aspectos como entender las necesidades del otro son un componente importante del liderazgo.
2. Trabajo en equipo
Quienes logren trabajar en equipo y colaborar con otros empleados estarán dando un paso seguro al éxito en su empleo.
El valor de la unión de fuerzas es muy alto para las empresas que desean escalar a otros niveles.
La colaboración productiva fomenta el logro de objetivos.
3. Habilidades de comunicación
La comunicación, cuando es exitosa, tiene 4 elementos que la componen:
• La comunicación escrita (redacción de mensajes, correos y otras comunicaciones internas).
• La comunicación visual que engloba el manejo de elementos gráficos o imágenes para la transmisión de mensajes.
• La escucha activa o esa habilidad para escuchar realmente lo que le inquieta al otro.
• La comunicación no verbal a través de la cual se proyectan gestos o expresiones faciales según el propósito.
4. Habilidades para la resolución de problemas
Los obstáculos son parte del trabajo, pero con alguien que disponga de las habilidades necesarias, estos se pueden transformar en oportunidades de aprendizaje.
La capacidad de manejarse en la aparición de problemas urgentes o de vieja data, es uno de esos ítemes que no pueden expresarse de forma comprobable en un currículo, pero que cuando logran demostrarse en una empresa, genera una percepción de valía muy importante.
5. Ética laboral
Hay detalles que nunca pasan de moda en el mundo laboral y, aunque los líderes de las organizaciones no suelen dedicarle mucho tiempo a la microgestión de los empleados, siempre es deseable que alguien cumpla con aspectos como:
• Puntualidad (no solo para llegar e irse, sino para la entrega de proyectos)
• Entrega de trabajos libres de errores que obliguen a rehacer trabajos.
• Procura de la excelencia
6. Flexibilidad / Adaptabilidad
Los empleados multitarea tienen dos caras: una funcional y otra que no.
La funcional tiene que ver con la posibilidad de adaptarse a los cambios. La que no, la notamos cuando una persona no termina de alcanzar grados de excelencia producto de las constantes incursiones en nuevas actividades.
De cualquier modo, si se sabe aprovechar esta capacidad de adaptación sin convertirse en un empleado que por querer abarcar mucho no termine siendo especialista en nada, entonces se tendrá una importante ventaja.
7. Autoevaluación
No todos se atreven a reconocer aquello en lo que pueden mejorar o aquello en lo que se han equivocado.
En el mundo de las habilidades blandas esto es fundamental porque, asumir sus debilidades y fortalezas, habla de puntos de vista que tienden a lo objetivo.
Un empleado con estas características tendrá menos sesgos y una aproximación más cercana a las posibilidades de mejora.
Conclusión
Las habilidades blandas se pueden o no tener, pero nunca es tarde para desarrollarlas.
Hechos como el de ofrecerse para actividades que impliquen mayor responsabilidad no solo hablan bien de ti como empleado o empleada, sino que te hacen ganar una valiosa experiencia.
No te descuides pensando que lo más importante son las habilidades técnicas. Distribuye y dedícales tiempo y energía, pero no te olvides de formarte en áreas que te permitirán relacionarte mejor con otros.